Durante unos meses, Raymond Felton fue solo un nombre para los aficionados de los Dallas Mavericks. Sabían que había llegado en el traspaso de Tyson Chandler y poco más. Una importante lesión de tobillo durante la pretemporada le impidió poder jugar hasta diciembre, y una vez estuvo recuperado, ya era demasiado tarde para hacerse con un hueco fijo en la poblada rotación de bases de los Mavs.

Felton podría haber optado por la vía rápida, haberse dejado llevar y seguir cobrando sus cheques sin jugar, y ahora probablemente estaría en su camino fuera de la liga. Esa era la fama que traía de New York, y fin y al cabo su carrera había sido correcta. En Charlotte fue el director de juego de unos Bobcats que bajo su batuta evolucionaron de ser una franquicia recién creada a jugar su primera eliminatoria de playoffs. En New York estaba dando el mejor nivel de su carrera y a punto estuvo de ser All Star, antes de ser enviado a Denver en el traspaso de Carmelo Anthony. Tras pasar por los Nuggets y los Portland Trail Blazers regresó a New York y tuvo un papel clave en los Knicks que pasaron a segunda ronda por primera vez en 13 años. Aquel vestuario se vino abajo, y con ello su rendimiento. Ahora estaba en Dallas, lesionado y sin espacio en la rotación.

Pero cuando se vio sin minutos no se rindió. Optó por lo contrario y siguió trabajando, buscando sus oportunidades, que fue recibiendo con cuenta gotas. Al final de la temporada, todos en la franquicia alabaron su esfuerzo.

“Es alguien con una integridad muy alta”, dijo Rick Carlisle el pasado mes de abril. “Es un gran competidor. No ha habido ni una sola vez este año en la que haya bajado la cabeza o se haya quejado. Estuvo lesionado, volvió y no había minutos para él, pero continuó siendo un profesional, continuó trabajando extremadamente duro.”

Ha tenido que esperar una temporada, pero Raymond Felton ya tiene su oportunidad. Ha dejado de ser solo un nombre para ser un jugador más. En la NBA moderna cada vez se necesitan más jugadores capaces de dirigir el ataque, y Felton está demostrando ser una opción fiable más en la ofensiva de Dallas. Con la baja por lesión de Chandler Parsons, Rick Carlisle optó por dar el puesto de titular a Felton, con el objetivo de que replicase la capacidad creadora que tiene el alero, y cumplió con las expectativas como lo que es: un base sólido en la NBA.

Felton cumple con su función de creador con nota. Después del partido contra los Boston Celtics, Felton es el jugador de los Mavericks que más ataques ha realizado esta temporada como atacante con el balón en un pick and roll (57 posesiones), y el 44.5 por ciento de las posesiones en las que tiene el balón acaban con él jugando un pick and roll, el porcentaje más alto del equipo según NBA.com. En estas jugadas los puntos por posesión anotados son bajos (0.68), pero aun así sirven habitualmente como medio para comenzar el ataque y ganar superioridades que se aprovechan en el otro lado de la pista.

A continuación vemos algunos ejemplos del buen hacer de Raymond Felton en el ataque de los Mavericks. En el primer caso, se trata de un pick and roll que termina con un lanzamiento claro de media distancia aprovechando el espacio que deja la defensa de los Phoenix Suns.

En el segundo caso, de Nuevo tras pick and roll, el pívot (Clint Capela) hace una ayuda más fuerte, y tras un movimiento de duda, Felton hace un cambio de ritmo y finaliza en el aro pese a la intimidación del pívot suizo.

En la siguiente jugada vemos como Felton se salta el bloqueo de Dirk, lo que obliga a Amir Johnson a cerrarle el paso hacia la canasta. Cuando Isaiah Thomas abandona la marca de Nowitzki la jugada se convierte en un sencillo triple para el alemán.
Esta es una de las acciones favoritas de Dirk Nowitzki, y siempre es buena noticia que los bases del equipo se entiendan con él.

La paciencia es otra de las virtudes de un buen base. A veces la jugada correcta no sale a la primera, sino que hay que aguantar un poco más hasta que se crea la situación clara para anotar. Eso es lo que vemos en la siguiente acción, con Felton aguantando pacientemente tras un pick and roll con Dwight Powell hasta que el pívot y la defensa están en la situación más idónea para hacer el pase.

“Nunca tienes suficiente gente capaz de crear en bote en esta liga”, dijo Rick Carlisle durante la temporada pasada. “Gente que pueda romper defensas y llegar a canasta, nunca tienes suficientes tipos así.”

Pero más que como creador para otros, Felton está siendo uno de los finalizadores del ataque de los Mavs. Su ratio de asistencias es el más bajo de su trayectoria deportiva (17.4 asistencias por cada 100 posesiones) y eso es debido a que Rick Carlisle le ha otorgado un rol diferente al que había tenido hasta ahora en su carrera. En resumidas cuentas, su labor es la de reproducir a una escala menor lo que hizo Monta Ellis en los años anteriores. Eso comienza con el juego tras bloqueo, como hemos visto antes, y continúa con el juego en transición, corriendo el contraataque en cuanto tiene ocasión.

Felton no finaliza tan bien como Ellis en el aro, pero hasta ahora sí que está pudiendo replicar parte de su éxito desde la media distancia, con un 55 por ciento de acierto entre 4.5 y 5.7 metros (15-19 ft.) de distancia de la canasta. Y aunque no es tan potente como el de Deron Williams, su crossover sigue siendo un arma muy a tener en cuenta.

En el otro lado de la cancha Raymond Felton también se encuentra en la media. Está siendo el segundo mejor defensor del pick and roll después de Deron Williams, permitiendo 0.74 puntos por posesión y un porcentaje de lanzamiento del 35.5 por ciento. Según los datos de player tracking defensivo de SportsVU su impacto es prácticamente nulo, con un -0.1 por ciento de variación en el lanzamiento de su par cuando está defendido por él con respecto a sus porcentajes habituales. En defensa Felton al menos no resta, y eso contribuye al mayor nivel defensivo que estamos viendo esta temporada de la línea defensiva exterior en comparación con el año pasado.

Es en las estadísticas con Felton y sin Felton en cancha donde más se aprecia estadísticamente su impacto en el juego. El base tiene el mejor Net Rating del equipo, siendo 10.7 puntos por cada 100 posesiones mejores que el rival con él en cancha. Cuando está en el banquillo sucede completamente lo opuesto, y los Mavs son 6 puntos por cada 100 posesiones peores que el rival sin él en pista. El impacto es especialmente evidente en ataque: la diferencia entre los minutos en los que está Felton y en los que no está es de 18.3 puntos por cada 100 posesiones.

Estadísticas con y sin Raymond Felton en pista (NBA.com)
OffRtg DefRtg NetRtg
En pista / On court 110.0 99.3 +10.7
Fuera / Off court 91.7 96.7 -6.0
Diferencia +18.3 -2.6

“Estoy sano, eso es lo importante, y estoy deseando ayudar a este equipo como pueda”, dijo Felton hace unas semanas, antes de comenzar la temporada regular. “Estoy muy concentrado. Como digo, estoy sano. El año pasado no lo estuve y este sí que lo estoy. Y estoy concentrándome en hacer lo que soy capaz de hacer.”

Con J.J. Barea siempre encajado en un rol ofensivo, y Devin Harris teniendo un mayor impacto defensivo, Raymond Felton es el base suplente de los Mavs que más equilibrio aporta en ambas facetas, sin destacar especialmente pero también sin ser un estorbo en ninguna de ellas. Entre ellos tres, Deron Williams, Wesley Matthews y Chandler Parsons tienen la función de hacer de “Monta Ellis por comité”, es decir, crear lo mismo que hizo Ellis sólo durante las dos últimas temporadas, pero haciéndolo de forma más repartida y eficiente. Y por ahora lo están logrando.

Este es Raymond Felton, el prototipo de jugador que marcaría el punto medio entre lo que es un buen base en la NBA y lo que es un base por debajo de la media. Cumpliendo en todos los apartados necesarios es como Felton desarrolló su carrera en la liga, y después de dos años esperando su turno, ahora ha recibido de las manos de Rick Carlisle una nueva oportunidad.

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